De los días de exámenes, de estrés y lectivos: Vacaciones de Navidad. Ahora toca sentarse en el sofá y ver las tan típicas películas navideñas de las tardes. Toca ver las luces de las calles y poner el nacimiento. Toca pensar un propósito para el próximo año que no cumpliremos, pues se nos olvidará tras la borrachera que hace un año prometimos no cojer.
También es momento de irse a esquiar, o en su defecto, de ver como otros esquían. O de escribir la carta de los Reyes Magos y de hacer las compras propias de la época.
He dicho que es tiempo de hacer proposiciones para el año que viene. Pues bien, tengo razón cuando digo que la gran mayoría de las personas que las hacen no las cumplen. Con los dedos de una mano se cuentan las personas que han cumplido sus propósitos. Que se muera ahora mismo Bill Gates si no digo la verdad (bueno, a lo mejor son 6, ojalá).
"Feliz Navidad, próspero año nuevo y que os den mucho dinero".
Creo que tambien es momento de empezar a dibujar a Tada y Tos en colores... ese es mi propósito para 2008, lo juro por Gates (que se muera ahora si miento).
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